sábado, 27 de junio de 2009

Las Intifadas



















Las intifadas
son el levantamiento de palestino contra el Israel.

Un choque de un camión israelí contra un coche de trabajares palestinos donde el saldo fue de 4 muertos ( palestinos) provoco que palestinos tomaran las calles de Gaza y Israel reacciono.

La primera Intifadas se dio en en 1987 con la conocida "GUERRA DE PIEDRAS", palestinos contra Fuerza de Defensa de Israel, cansados de ocupacion de colonias judias en Gaza y Cisjordania.
Las intifadas se ditinguen por sus larga duraciones y por una importante participación del pueblos sobre todo por la cantidas de jovenes que son quienes defienten estos ideales.

La segunda Intifadas se produjo el 29 septiembre del 2000 hasta 2005 y fue a causa de la visita de Ariel Sharon a la explanada de mezquitas para reivindicar el lugar en el que se encuentran los restos del Templo de Salomón, cual provoco la reacción de palestinos.
Al día siguiente, en la oración del viernes, los palestinos congregados en la explanada lanzaron piedras a los judíos que rezaban en el Muro de las Lamentaciones. La policía israelí respondió con fuego real y mató a siete palestinos, mientras los disturbios se extendían por todo el Jerusalén árabe.

En agosto de 2005, el Ejército israelí desmanteló los asentamientos judíos de la Franja de Gaza por orden de Sharon (quien desaparecería repentinamente de la escena política en enero de 2006, al sufrir una hemorragia cerebral que lo mantiene en coma hasta hoy). Tras la desconexión unilateral, el caos se instaló en el pequeño territorio. En junio de 2007, Hamas tomó el control de la Franja y expulsó a Cisjordania a las fuerzas leales a Al Fatah.


Israel es el opresor directo de la nación palestina. También ha cometido muchas agresiones contra las masas y otros crímenes en la región y por todo el mundo al servicio del imperialismo. Invadió Líbano en 1976 y en 1982, y mató a más de 20,000 libaneses y palestinos. En 1982, bombardeó un reactor nuclear de Irak. En 1991 y 2003 apoyó a Estados Unidos en las guerras contra Irak. Los agentes israelíes han entrenado a torturadores de Guatemala, Sudáfrica y muchos otros países; Israel vende armas a gobiernos reaccionarios pro yanquis en todo el planeta.





LA Historia:

Desde el siglo XVI hasta la Primera Guerra Mundial, el imperio otomano gobernó Palestina. La nación palestina moderna se forjó en el curso de la resistencia contra ese imperio, con una cultura común, un territorio contiguo y una vida económica truncada pero coherente de agricultura y procesamiento de productos agrícolas (como el aceite de oliva). Al final de la I Guerra Mundial, en 1918, unos 680,000 palestinos y 56,000 judíos (algunos de ellos eran refugiados de los pogromos de Europa) habitaban Palestina, y los primeros eran dueños del 97% de las tierras.

Después de la I Guerra Mundial, las potencias imperialistas se repartieron Palestina y los demás territorios del derrotado imperio otomano en medio de una encarnizada competencia por el petróleo, un producto económico y militar muy codiciado. En 1922, Gran Bretaña logró que la Liga de Naciones le otorgara un “mandato” para gobernar a Palestina como colonia. De 1933 a 1945, en medio de la II Guerra Mundial y el holocausto en Europa, Gran Bretaña y Estados Unidos restringieron la inmigración de los judíos a sus países para que emigraran a Palestina.
Los sionistas europeos empezaron a colonizar la Palestina histórica (lo que hoy son Israel, Gaza y Cisjordania) en la década de 1880. El movimiento sionista surgió en parte como respuesta de ciertos sectores judíos a la persecución en Europa. Pero en contraposición a las fuerzas que luchaban contra la reacción (muchas veces dirigidas por comunistas, que gozaban de mucho apoyo de los judíos), los dirigentes sionistas ofrecieron establecer un estado colonizador en el Medio Oriente al servicio de las potencias imperialistas. Cuando los imperialistas ingleses aprobaron ese plan al comienzo del sigo XX, empezó a llegar una ola de colonos sionistas.
En 1936, los palestinos se alzaron en armas contra las autoridades británicas y los colonos sionistas. En 1939, Gran Bretaña aplastó el levantamiento sin piedad y promulgó leyes de emergencia que imponían la pena de muerte a todo palestino que tuviera un arma.

Tras la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos surgió como la primera potencia imperialista y reemplazó a Gran Bretaña como mandamás en el Medio Oriente. En noviembre de 1947, maniobró una resolución de la ONU que dividió a Palestina en dos estados, un estado sionista y otro árabe. En aquel momento, los palestinos tenían el 92% de la tierra y el doble de la población que los sionistas, pero la división le dio el 54% del territorio a Israel. En mayo de 1948, cuando los palestinos y los países árabes rechazaron la división de Palestina, Israel inició una guerra contra los palestinos. Las fuerzas israelíes masacraron a 250 personas indefensas en el pueblo de Deir Yassin, 100 de ellas mujeres y niños, con el fin de sembrar terror y hacer huir a los palestinos. En enero de 1949, cuando terminó la guerra, casi 800,000 palestinos (los dos tercios de la población) estaban exilados en Líbano, Jordania, Siria, Gaza y Cisjordania, e Israel confiscó el 77% de Palestina.


En los años 60, se dio un auge de lucha revolucionaria en Palestina. En 1965, varias organizaciones guerrilleras emprendieron la lucha armada con el fin de crear un estado democrático laico (no religioso) en todo el territorio palestino. En marzo de 1968, los combatientes palestinos repelieron un ataque israelí de gran envergadura en la batalla de Karameh, Jordania. En 1967, Israel lanzó la “guerra de Seis Días” y se apoderó de lo que le faltaba de la Palestina histórica (el 23% restante del territorio de Cisjordania, Gaza y Jerusalén Oriental), además de la península de Sinai (de Egipto) y Golán (de Siria).

La Resolución 242 de la ONU ordenó que Israel se retirara de las tierras ocupadas, pero Israel empezó a construir asentamientos fortificados. Desde 1967 los palestinos de Cisjordania y Gaza han experimentado una cruel ocupación militar, no han tenido derechos básicos y no han podido desarrollar una economía viable.